13 de marzo, 2024 | Yenny Escalante
Este 15 de marzo, la Federación Nacional de Trabajadores de Aseo de Bolivia (FENTRAB) conmemora su 12º aniversario pidiendo a la población boliviana y a las autoridades locales y nacionales el reconocimiento al trabajo de aseo, el respeto y la garantía de sus derechos laborales, una remuneración justa acorde al trabajo que realizan, y seguridad laboral para lograr la tan anhelada estabilidad económica y vida digna.
Situación laboral
El ejecutivo nacional de esta organización, José Víctor Zalles, relató que estos doce años de vida no fueron fáciles, pues año tras año deben hacerle frente a los abusos y a la vulneración de derechos de las cuales son víctimas muchas trabajadoras y trabajadores de este rubro, por la precarización del empleo, los contratos eventuales, el no cumplimiento a las 8 horas de trabajo y remuneraciones que no les permiten llevar, junto a sus familias, una vida digna.
“La situación es lamentable, es un tema de nunca acabar por toda la vulneración que sufren los compañeros, tanto en derechos humanos, derecho laboral, los acosos que sufren a diario y el abuso de distintos patrones hacia los compañeros que trabajamos”, sostuvo Zalles.
El dirigente contó que trabajadoras de Viacha “sufren acoso sexual y laboral por parte de los supervisores de las municipalidad, así como de la empresa privada”, quienes presuntamente ejercen poder sobre las mujeres como condición para que sigan trabajando. O, en lugares como Beni, donde les prohíben embarazarse. “La primera mujer en embarazarse es retirada sin derecho a nada”, dijo.
También refirió que en Santa Cruz les prohíben formar un sindicato de trabajadores, vulnerando el derecho al fuero sindical. Tampoco reciben la indumentaria adecuada para cumplir sus jornadas laborales, ni la remuneración correspondiente de las horas extra que cumplen, mucho menos un bono que cubra la carga nocturna, la cual es la más riesgosa.
“Tenemos mujeres (trabajadoras) que llegan (limpiando) al rincón más profundo, donde no llega el carro basurero, entonces ellas tienen que cargar en la espalda más de 60 o 70 kilos de basura, hasta el punto de acopio donde pueda llegar el carro recolector”, lamentó.
Al margen de ello, el personal de aseo debe lidiar con la basura altamente peligrosa como jeringas, vidrios rotos, animales muertos, heces, etc. En caso de sufrir algún accidente, como usualmente ocurre, muchos trabajadores ni siquiera tienen un seguro de salud, puesto que fueron contratados como “jornaleros” o “trabajadores de línea”.
“De un 100% de trabajadores a nivel nacional, con ítems debemos estar un 35 o 40%, con contratos eventuales está un 34% igual. Y, del resto, lamentablemente, (los patrones) se han inventado (la figura de) jornaleros, lo cual no corresponde, porque nuestro trabajo es permanente”, añadió el dirigente.
Del total de trabajadores, según Zalles, un 75% son mujeres, quienes son madres solas y, por ende, el único sustento para sus familias.
La labor que realizan estas personas es compleja, pues deben estar bajo intensas jornadas bajo el sol, lluvia, viento o frío, con un salario mínimo de un gran porcentaje de trabajadores.
¿Qué piden?
Los trabajadores de la FENTRAB piden estabilidad laboral, que implique el pago de salarios dignos “a tiempo”, y que sea un monto justo, acorde al trabajo que realizan.
También piden ítems para que todo el personal cuente con un seguro de salud, ya que actualmente sufren de enfermedades desconocidas para ellos. “En época de sol, las heces de los animales se secan en la calle, la gente pisa y ese polvillo lo consumen nuestros compañeros de aseo, entonces se han dado caso de enfermedades que nunca se han podido descifrar”, dijo.
Las enfermedades son parecidas al cáncer de piel -relata Zalles-, que se visualiza alrededor de los ojos, las manos, la boca, como una especie de herpes.
“También pedimos a las autoridades que no se menosprecie el trabajo del personal de aseo (…) Pedimos respeto y que se nos reconozca, nuestro trabajo no es fácil, es pesado, es muy sacrificado, peligroso. También se pide a la ciudadanía que respete a la gente que está barriendo, que está limpiando, es gente humilde, es gente que pocas veces se expresa o habla, la misma población nos discrimina (…) Nosotros no merecemos ese trato, somo personas, trabajamos con basura, pero no somos basura”, enfatizó.
La FENTRAB es parte de las organizaciones que conforman el Colectivo Urbano Nacional, que es apoyado por el Programa Urbano de UNITAS.